Los cuidados paliativos son un concepto de la atención al
paciente que incluye a profesionales de la salud y a voluntarios que
proporcionan apoyo médico, psicológico y espiritual a enfermos terminales y a
sus seres queridos. Estos
cuidados ponen el énfasis en
la calidad de vida, es decir, en la paz, la comodidad y la dignidad.
La meta principal es el control del dolor y de otros
síntomas para que el paciente pueda permanecer lo más alerta y cómodo posible.
Los servicios de cuidados paliativos están disponibles para personas que ya no
pueden beneficiarse de los tratamientos curativos; el paciente típico de
cuidados paliativos tiene un pronóstico de vida de 6 meses o menos.
Los programas de
cuidados paliativos proporcionan servicios en varias situaciones: en el hogar,
en centros de cuidados paliativos, en hospitales o en establecimientos
capacitados para asistir enfermos. Las familias de los pacientes son también un
enfoque importante de los cuidados paliativos, y los servicios están diseñados
para proporcionarles la asistencia y el apoyo que necesitan.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a los Cuidados Paliativos como: "... el
cuidado activo y total de las enfermedades que NO tienen respuesta al tratamiento curativo, siendo el
objetivo principal conseguir la mejor calidad de vida posible para los
pacientes y sus familias."
Filosóficamente, el alivio del sufrimiento es el objetivo
dominante de los cuidados paliativos.
Objetivos de los Cuidados Paliativos según la OMS
- Alivio del dolor y otros síntomas
- No alargar ni acortar la vida
- Dar apoyo psicológico, social y espiritual
- Reafirmar la importancia de la vida
- Considerar la muerte como algo normal
- Proporcionar sistemas de apoyo para que la vida sea lo
más activa posible
- Dar apoyo a la familia durante la enfermedad y el duelo
Paciente
terminal
Cuando un paciente su expectativa de vida es corta, se
dice habitualmente que está en fase terminal. En
la práctica, estamos ante un enfermo terminal cuando existe un estado clínico
que provoca expectativa de muerte en breve plazo. Una persona que confronta un diagnóstico de enfermedad
terminal enfrenta tres aspectos importantes: el tipo de tratamiento, calidad de
vida digna y la autonomía. La persona moribunda tiene una variedad de
necesidades, que no tienen que ver únicamente con los cuidados paliativos y
médicos sino con deseos, miedos, ansiedades e inclusive, esperanzas. Durante su
proceso de agonía se afecta también al núcleo familiar. Todos tienen que lidiar
con la realidad de la enfermedad, con su desarrollo y con el desenlace de la
muerte. (Sánchez, Melba, 2007).
Edu Emilia Saez
Consejera Profesional
Tanatologa Certificada